He estado desconectada casi un mes,
pero es por que….¡Nos mudamos! Las últimas semanas han sido una locura, rodeada
de cajas, cinta de embalar y sí, bastante basura.
Hace 5 años a Borja le salió un
trabajo en Valencia, así que nos tuvimos que mudar allí desde Santander. Dejé mi
trabajo y me fui con él. Al principio, la verdad que me resultó un poco difícil
porque no encontraba trabajo y fue muy frustrante. Además, no conocía a nadie,
ni tenía a mis amigos ni a mi familia cerca. Así que después de meditar un
poco, volví a estudiar, hice un máster para poder mejorar mis posibilidades
laborales y además, tuve la oportunidad de conocer gente con los mismos
intereses que yo. Me encontré con gente genial, empecé a tener por fin un poco
de vida social fuera de los compañeros de trabajo de Borja y dejé de sentirme un
poco como “ama de casa aburrida”.
Después,
encontré un trabajo como consultor de Oracle, que no era el trabajo de mi vida
(me pasé como 3 meses intentando entender qué narices estaba haciendo), pero
bueno, era un trabajo que pagaba las facturas, y de nuevo conocí a un montón de
gente genial que son todavía mis amigos. Después de 4 años en Valencia, me salió
la oportunidad de volver a Santander no solo a trabajar, sino ¡a trabajar de lo
mío! Así que, ¿cómo podía rechazar una oferta laboral así? Acepté sin pensármelo,
así que tuvimos que pasar el siguiente año separados. La semana pasa, a Borja
le salió otra oferta de trabajo de esas que tampoco puedes rechazar, así que
eso sólo significaba una cosa: ¡mudanza!
Me ha
dado muchísima pena, porque en el fondo de mi corazón sabía que esa casa, cada
vez que volvía unos días a Valencia, era MI casa. Tuve que decirle adiós a un lugar
lleno de buenos recuerdos de cenas con amigos, películas en casa y juegos de
mesa. y también tuve que decir adiós a una ciudad que sí, odié bastante al
principio pero aprendí a querer mucho.
¡Pero
así es la vida, amigos! Hemos tenido que cerrar una puerta, quien sabe si para
siempre.
Después
de esta historia de mi vida, quería enseñaros cómo organizo las cosas cuando me
mudo. Me gusta especificar lo que hay dentro de cada caja y a dónde pertenece. Divido
las cajas por habitación. A: Cocina; B: Salón, C: Baño, etc. En el cuaderno,
con el código A, especifico lo que hay dentro (cucharas, boles, platos, lo que
sea)
No fui
capaz de encontrar plástico de burbujas en ningún chino de mi alrededor, así
que me las tuve que ingeniar envolviendo las cosas un poco delicadas con sábanas
viejas que tenía para tirar. No es la mejor solución del mundo, pero mejor que
nada.
La mejor solución para ahorrar un montón de espacio son las
bolsas que se pueden aspirar. Usé como 10 para las almohadas, cojines, cortinas,
la ropa..lo major del mundo.
Una odisea diferente fue encontrar una tienda que me quisiera
dar las cajas usadas. Después de preguntar en 5 o 6 sitios, las conseguí.