Me encantan los cactus.
Es una de las pocas plantas que no mato. Como hay temporadas que las paso
enteras fuera de casa por trabajo, no puedo tener todas las plantas que me
gustarían porque, básicamente, se me mueren todas por falta de atención. Los cactus
son duros, resistentes y aguantan casi todo. Aún así, tengo que reconocer que he
mandado alguno al cielo de las plantas.
Para disfrutar siempre
de un cactus en plena forma y asegurarme de no matarlo cuanto estoy de viaje,
empecé a trabajar en este gracioso bordado. Además, ¡Es super fácil!
NECESITAS:
1 pieza de tela de
bordado
Aguja bien afilada
Hilo de algodón (de
6 a 8 hilos) en diferentes colores
Bastidor
Lo primero
que hice fue dibujar con un lápiz lo que quería bordar. Después, fui rellenándolo
con lo que se denomina puntada en cadena, pero también se puede hacer con el
punto clásico, que es más sencillo. Simplemente es familiarizarse con este
punto, y ponerse manos a la obra, ¡es muy sencillo!
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